Este modelo de 7 kW y 32 A también está ajustado para reducir el desperdicio de energía y aprovechar cada kilovatio posible para la batería. Su diseño de alta eficiencia mantiene baja la generación excesiva de calor y evita el consumo en espera que puede restar ahorros. Conectado a la misma fuente de alimentación monofásica de 230 V, el cargador toma 32 amperios para que los vehículos reciban la potencia completa de 7 kW para la que están preparados. El software inteligente de gestión energética supervisa la red en tiempo real y ajusta sobre la marcha el voltaje y la corriente, aprovechando la energía adicional disponible fuera de las horas punta cuando es más económica. Sistemas de control de temperatura y protección contra sobrevoltaje/bajavoltaje añaden una capa adicional de fiabilidad manteniendo niveles altos de eficiencia. En conjunto, el enfoque en ahorro energético reduce la factura mensual y apoya un uso más limpio y sostenible de la red eléctrica.