La estación gestionada en la nube convierte cada unidad en un monitor y controlador inteligente. Cada cargador se conecta a la nube privada de Green Oceans, permitiendo a los operadores ver el estado en tiempo real, revisar el consumo energético y realizar diagnósticos remotos. Alertas predictivas advierten al equipo antes de que ocurra una avería, mientras que la carga eléctrica se distribuye suavemente entre grupos de 60-240 kW. Los usuarios también reciben estadísticas de carga, créditos de carbono y enlaces de pago sencillos, haciendo que la gestión de la estación sea más rápida y considerablemente menos estresante.